2.5.08

Nuestra filosofía

Cocinar (y comer lo cocinado) es un arte que se disfruta con todos los sentidos

Cocino, no para hacer que mi hambre desaparezca. Bueno, al menos esa no es la única razón.
Para eso bastaría comprar una bolsa de Pelmeni (que ya de por si saben buenos y son fáciles de preparar...) Pero digo que no cocino para llenar mi estómago, sino para percibir esos aromas que se desprenden de los alimentos al cocinar. Para aplastar con mis manos la masa de la pizza y para hacer pedacitos la lechuga. Para ver cómo cambian de color las cebollas y cómo se encogen los champiñones. Para escuchar a la sopa hervir y a la carne asar. Para probar los platillos en todas sus etapas... Para tener la satisfacción de que, sin ser profesional, yo misma lo hice.

Soy estudiante, tengo tareas, trabajos finales, otros hobbies que atender, carencias frutales y vegetales (dichosos ustedes que tienen plátanos machos, espinacas, brócolis...!) y sin embargo nada de esto me desanima a la hora de cocinar.

Para mí, todo esto es más bien como un juego al que uno se vuelve adicto después de haber ganado varias veces. También se me ocurre que es como jugar con Lego. Con los mismos cubos puedes hacer miles de cosas diferentes. El resultado que quieras obtener sólo depende de cómo combines los cubos, qué colores mezcles, qué tanto tiempo quieras dedicar al diseño... Pero al igual que con el Lego, no se necesita ser ningún profesional para crear cosas sorprendentes.

Los ingredientes? Eso no es nada del otro mundo... recuerdo que alguna vez descartaba de la lista las recetas de panes y pasteles porque pensaba que sería muy difícil encontrar algún lugar donde vendieran levadura. ;)
No tienes jengibre ni salsa Worcestershire? Cualquier tienda tendrá, y si te emociona un poco esto de cocinar, lo más probable es que pronto vuelvas a encontrarte alguna receta con esos ingredientes. O lo que es preferible, pronto se te ocurrirá a cuáles de tus recetas favoritas podrías agregar esos ingredientes para que sepan aun mejor. =)

Entusiasmo; voluntad; imaginación; valentía para usar elementos y técnicas desconocidas; valor para usar los elementos más comunes de una manera completamente nueva...
Esas sí son cosas que debes reunir antes de empezar. Son los ingredientes principales de las cosas ricas e interesantes.
Ah... los comensales de vez en cuando pueden ser necesarios, por supuesto, pero esos tienen la propiedad de surgir de la nada y no son difíciles de conseguir.

Y bien, hace unas semanas me dí cuenta de que ultimamente he estado cocinando con mucha regularidad. Fue entonces que dije: créemos un blog! De repente motiva a alguien a cocinar.

Las recetas que pongo aquí no son nada difíciles ni complicadas. Créeme, si yo pude hacerlas tú también puedes. Yo tampoco he estudiado Gastronomía, y nadie me ha enseñado a cocinar. He aprendido simplemente así, cocinando. Los libros y el internet se han encargado de enseñarme, yo sólo he puesto las manos. Bueno, todas las recetas del blog han sido probadas y como evidencia pongo las fotos que yo misma he tomado. (Ups, tampoco soy fotógrafa profesional ;) Ehm..
No me gustan los libros de cocina que no tienen fotos, y por eso no agregaré recetas (aunque ya las haya probado y me gusten) si no tengo fotos de ellas. Mejor esperaré hacerlas otra vez y les tomaré fotos antes de subir las recetas. Una foto persuade más que una receta simple o que unos ingredientes fáciles de encontrar.

Como ya dije, espero que este blog exhorte a alguien a intentar nuevas recetas. Si tienes alguna duda o si algo no está claro, con gusto intentaré ayudar. Si te interesa alguna receta que todavía no esté aquí, también puedes escribirme y juntos investigarémos y la probarémos.

Bueno, practicamente eso es todo lo que tenía que decir con motivo de la primera semana de vida del blog.
Bienvenidos, siéntanse como en casa!

A los que viven cerca: no olviden asistir al sábado de película. Habrá pizza o alguna otra cosa. Será gratis para todos los que confiesen haber leído este post.. Woooah :D

No hay comentarios.: