No es knäckebröd ya sé, aquél es pan delgado y duro - estos son esponjosos y suaves. Sólo los puse en esta cajita de madera que me traje de Jönköping =ъ Foto: Dyana- 4.Mar.10
Es la primera vez que hago este pan. Ni siquiera sabía cómo debía quedar ni qué sabor tendría. Ahora, ya que los he probado me han encantado, especialmente porque se pueden guarnecer tanto con rellenos dulces o salados, o simplemente para acompañar a una crema calientita. La experiencia resultó muy satisfactoria así que con alegría les pongo aquí la receta.
INGREDIENTES
- 2 tazas harina de trigo
- 1 taza harina de centeno
- 1 taza agua tibia
- 1 cda. generosa de miel
- 1 cda. levadura seca
- 1 cdita. azúcar
- 1 cdita. sal
- 30 g. mantequilla derretida
ELABORACION
- En un plato hondo mezclar la levadura con el azúcar y agregar el agua tibia. Cubrir y dejar reposar 10 mins.
- Con la ayuda de un tenedor, mezclar en un bol grande una taza de harina de trigo, la sal, la miel y la mantequilla derretida hasta obtener una mezcla seca y homogénea: La harina toma un color dorado y un delicioso aroma a miel.
- Agregar a la harina la mezcla de la levadura y revolver con el tenedor hasta obtener una pasta sin grumos.
- Agregar la taza de harina de centeno y revolver. Si se necesita agregar más agua tibia.
- Agregar la taza de harina de trigo restante y revolver bien hasta incorporar todo.
- Volcar la masa en una superficie enharinada y trabajar durante 10 minutos. (La masa debe quedar suave y elástica)
- Dejar reposar la masa en el bol cubierto con un paño limpio hasta que doble su volumen. (En un lugar tibio y sin corrientes de aire aprox. 1 hora)
- Volver a trabajar la masa una vez más y dejar reposar un poco (cubierta la masa para que no se reseque)
- Formar panes de la forma y tamaño deseados y colocar en una charola previamente engrasada.
- Hornear a 150´C durante 15 mins. aproximadamente, o hasta que se vean de un color agradable en la superficie.
Estos panes son deliciosos y muy saludables. Con un mejor sabor y con más nutrientes que el pan blanco simple. Resultan suaves y esponjositos, super buenos. Hacerlos es muy fácil, barato y evitas los conservadores de los panes industriales. Yo los hice de varias formas y tamaños. Los rectángulos medianos me parecieron más prácticos para comer con un relleno salado, así como con queso, lechuga y salchichas. Como el que me acabo de comer... =D Los pequeños redondos son ideales para comer con una crema (ver: Crema de Espinacas y Manchego, Crema de zanahoria, papa y apio) o como bocadillos con un poco de mermelada, cajeta, o miel... como los que alegremente asimismo me comí. Jiji-